Área de usuarios
 

El Yoga y la lentitud

El Yoga y la lentitud

Leí en algún sitio que no recuerdo… (ya que no guardé la fuente, aún no me había planteado hacer un blog, jeje…) pues eso, que leí que en el Neolítico nuestra mente iba muy rápida pero nuestros movimientos eran lentos; mientras que ahora, en el siglo XXI esto es muy diferente, nuestra mente va lenta, pero nosotros vamos muy rápido durante todo el día.

Y sí claro, antiguamente nos iba la supervivencia, nos iba la vida, pero es que ahora también nos va la vida, sobre todo la de nuestra alma, y deberíamos volver a recuperar esos saludables patrones ancestrales.

El yoga nos puede ayudar y mucho, pero siempre y cuando lo practiquemos desde la lentitud para poder entrar en un estado de quietud y que nuestra mente así, se aquiete, se clarifique y se expanda, para que estemos más despiertos y nos podamos dar cuenta, entre otras cosas, de cuando nuestros movimientos deben ser rápidos porque es imprescindible o necesario, y cuando no.

Según Osho sólo nos interesan los resultados. Nos adelantamos a nosotros mismos; nuestro movimiento está perturbado, pero todo está justo aquí. Sólo tienes que dejarte caer…

 

Comentario de Mercè Miró

La práctica que nos propone Yoganya es una invitación a bajar el ritmo.

Bajar el ritmo para cuestionarse.

Cuestionarse para escucharse.

Escucharse para mirarse.

Mirarse para atenderse.

Atenderse, para Ser